Bajo el epígrafe de la Unión Académica Dominicana y con el título “Clases Dominantes y Grupos Gobernantes no necesitan la UASD. Fracaso Demanda Presupuestal Obliga a Nueva Estrategia”, el distinguido académico Faustino Collado, conceptualiza con relación a la afirmación de la titulación de referencia.Al pie de este párrafo, he querido realizar un pequeño ejercicio piramidal, en el que coloco con toda lógica, la imagen de la integración de los sectores que convergen en la acción académica de la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
Más arriba a los empleados, que son el soporte operativo y en la cima (cima con "c") a los profesores, transmisores de conocimientos para dar el soporte por excelencia a la creación intelectual para contribuir al desarrollo institucional, económico, social y político de la Nación.
El maestro Faustino Collado, tendría razón, si afirmara que las clases dominantes y los grupos gobernantes de la Nación Dominicana, creen que no necesitan a la UASD. No así cuando asegura, que esas clases dominantes y grupos gobernantes no necesitan de la UASD.
La base de esa pirámide con que graficamos el contexto del accionar de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, es la razón de ser de todo el sistema, y ante la propuesta de sectores enemigos de la UASD, de crear estrategias para destruir esta conformación académica tripartita, a través de la negación de un justo presupuesto operativo y segregación de los estudiantes que integran su base, ocurriría un fraccionamiento estructural, conforme a que dicha conformación es de características “policlasista organizacional”.
Sin olvidar el agravante de los efectos del derrumbe total de la pirámide a consecuencia de la destrucción de su base, que originaría un alto e incontrolable incremento del desempleo en la República Dominicana y un desamparo total de una gran capa de la comunidad urbana de las grandes cabezas de provincias y sectores rurales, el fraccionamiento político, social y cultural, producto de la integración estudiantil “policlasista”, en que una gran parte de los actores del grupo, no sería aceptada en las universidades privadas de la Nación, por el alto nivel discriminatorio que existe en muchas de ellas.
El futuro de un gran sector estudiantil que forma parte de la base de la pirámide, que utilizamos como una expedita vía de comunicación, sería incierto y muchos de ellos, recurrirían a indeseados medios inapropiados de subsistencia, en la búsqueda del porvenir que por falta de visión de Estado, se le ha negado.
Evidentemente, que las clases dominantes y los grupos gobernantes de la República Dominicana, han perdido de vista el efecto negativo que para sus intereses económicos y políticos, representaría seguirle negando a la Universidad Autónoma de Santo Domingo, el derecho de seguir contribuyendo a elevar los niveles culturales de la sociedad, buscar la verdad, la proyección de un mejor porvenir de la sociedad dominicana y el afianzamiento de sus auténticos valores, así como también contribuir con el fortalecimiento de la familia a través de políticas sociales, culturales y morales que desarrolla permanentemente.
Esa gran capa de jóvenes sin futuro, que surgiría de la destrucción piramidal del trabajo permanente que realiza la Universidad Autónoma de Santo Domingo por la dignidad nacional, conllevaría entre otras iniquidades, a un incremento vertiginoso de la delincuencia, que sería justificativa, por la negación al derecho de estudios y capacitación para los jóvenes que han tomado la decisión de granjearse un futuro para ellos y su entorno familiar a través de la Primada de América, a través de la Institución más digna del Estado de la República Dominicana.
Que sepan los “dueños del país” que ellos tienen más que perder negándole a la juventud el derecho de ser buenos y mejores dominicanos, tronchándole un avance de responsabilidad social que están deseando y que solo lo pueden lograr a través de la universidad del pueblo, a través de la UASD que otorgándole a esta universidad el justo presupuesto que merece por lo que ha hecho en 477 años de existencia y por lo que está llamada a hacer en el porvenir de la República Dominicana, porque solo esta universidad es capaz de interpretar a Confucio, cuando dijo, citamos: “Donde hay educación no hay distinción de clases.”
Faustino Collado tendría razón, pero...
...ES TIEMPO DE LEVANTAR UNA SOLA VOZ POR EL PORVENIR DE LA REPUBLICA DOMINICANA
“EXIGIMOS UN JUSTO PRESUPUESTO PARA LA UASD”
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